Todos
conocemos, por supuesto, los hábitos de higiene personal indispensables,
sin embargo, con la preparación para la llegada, en el embarazo, algunas
cosas van a cambiar, primero, respecto a nuestras costumbres, y luego, respecto
al cuidado tendremos con el entorno.
La embarazada debe prestar mucha atención a sus costumbres higiénicas, debido al aumento de secreciones que se producen en este período y para prevenir la aparición de molestias en la piel, infecciones o cualquier otra complicación.
Higiene personal
El baño o
la ducha deben ser diarios. El agua no debe estar demasiado caliente
para evitar molestias circulatorias. El baño no estará desaconsejado a menos
que las membranas que rodean al feto ya se hayan roto o que el tapón mucoso
haya sido expulsado. El único peligro durante el baño o la ducha es el riesgo a
las caídas, para evitarlo la embarazada tendrá cuidado y puede utilizar
superficies antideslizantes.
La
mujer embarazada debe lavarse las manos cuando cocina y manipula alimentos
crudos, antes de las comidas y cuando se cuidan animales domésticos.
Los dientes y
las encías se vuelven más sensibles, se deberán lavar después de cada
comida y si es preciso utilizar cepillos, dentífricos y colutorios especiales.
La higiene
íntima es muy importante, tanto de la región genital como de la
anal. Se utilizarán jabones líquidos, neutros y no irritantes. Durante el
embarazo es normal un aumento de las secreciones vaginales, pero si aparecen
molestias como picor o escozor se debe acudir enseguida al ginecólogo. En caso
de hemorroides se
aconseja: el lavado de la zona después de cada defecación y secar con suavidad
con un movimiento de delante a atrás, la aplicación de bolsas de hielo y
utilizar una medicación tópica o supositorios sólo si el médico que lo
prescribe sabe que está embarazada.
Los cambios hormonales provocan en la piel de la embarazada un estiramiento y una luminosidad característicos. Tiende también a volverse más sensible y necesita productos adecuados para esta nueva situación, conviene utilizar productos suaves y con un pH neutro que respeten la acidez natural de la piel.
En
la cara debido a un temporal desequilibrio en la pigmentación podrían
aparecer manchas, los lunares también pueden aumentar de tamaño y número.
Se hace necesario utilizar cremas con filtros solares elevados y acudir al
dermatólogo siempre que se de alguna anomalía destacable.
El cabello crece
más y más bonito. Puede ocurrir los primeros meses que el cabello se vuelva
graso a causa de un aumento de la secreción sebácea, se aconsejan shampoo
suaves y no lavarlo más de lo habitual. Pueden aparecer reacciones alérgicas en
el cuero cabelludo, conviene evitar las permanentes, los tintes fuertes y
cualquier producto agresivo.
Las estrías surgen
en aquellos lugares donde la piel se encuentra más tensada. Resulta muy difícil
hacerlas desaparecer una vez se han formado, es importante prevenirlas desde el
primer día utilizando diariamente cremas, lociones y aceites muy hidratantes.
El pecho sufre
importantes modificaciones: las glándulas mamarias se agrandan y endurecen, las
venas se hacen más visibles, el pezón se ennegrece y se vuelve más prominente.
Todos estos cambios exigen cuidados a la piel del pecho para evitar la
aparición de estrías y prestar mucha atención a la higiene del pezón para prevenir
las molestas grietas.
Ropa
y calzado
- Las únicas prendas de vestir contraindicadas son aquellas que aprietan demasiado.
- La ropa debe ser suave y amplia.
- Los zapatos deben ser cómodos, de horma ancha y con tacones no muy altos (máximo 5 cm).
- Es necesario un sujetador adecuado, de fibras naturales, tirantes regulables, que no apriete demasiado pero capaz de sujetar bien el pecho.
- La faja únicamente debe utilizarse cuando los músculos abdominales no puedan cumplir su función (embarazo de gemelos o de un feto muy grande), o en mujeres que tienen un vientre muy relajado.
- Las medias, si se utilizan, deben ser de compresión adecuada para evitar la aparición de varices y se aconsejan hasta la cintura.
Actividades físicas
La mujer embarazada debe cuidarse tanto en reposo como en movimiento. Es importante que se habitúe siempre a estar recta y a sentarse correctamente, con la espalda bien erguida y las piernas ligeramente abiertas. Por otro lado toda embarazada debe dormir un mínimo de ocho horas diarias y descansar a lo largo del día.
Los deportes durante
el embarazo son beneficiosos siempre y cuando no requieran mucho esfuerzo, ni
una actividad continuada o que impliquen riesgo de torceduras, dislocaciones o
caídas. Están desaconsejados: los saltos de trampolín, el esquí, la equitación,
el tenis, la inmersión, las artes marciales, las motos…
Otros
deportes pueden practicarse pero prestando especial cuidado, como la bicicleta,
hacer gimnasia, el esquí de fondo o bailar.
Durante
el embarazo se aconseja nadar y andar. Caminar implica tonificar los músculos,
mejorar la respiración y el riego sanguíneo y mecer a la vez al bebé.
La actividad
sexual durante el embarazo es beneficiosa tanto para la madre, que con el
contacto físico se sentirá más segura, como para el padre, que en esta etapa
puede sentirse un poco desplazado, y el bebé, que recibe indirectamente el
bienestar de esta intimidad.
En
caso de amenaza de aborto, parto prematuro u alguna otra complicación, el
ejercicio físico siempre estará contraindicado.
Debemos cuidar
la higiene de lo que respiramos: no acudir en lo posible a ambientes cerrados y
cargados, o donde haya productos tóxicos y, por supuesto, además de no fumar,
también evitar la exposición al humo del tabaco ya que el riesgo de problemas
congénitos asociados al humo del tabaco es también real en las fumadoras pasivas.
Es
indispensable la cuestión de evitar la exposición al humo del tabaco y no
fumar, pues se relaciona con problemas que van desde el parto
prematuro, la preeclampsia,
varios defectos congénitos e
incluso se ha hablado de que podría afectar al cerebro
del bebé.
Hay
que tener especial cuidado con la exposición a productos químicos pero, en
realidad, descubrimos que la protección absoluta no existe y hay muchos químicos en
el ambiente que pueden ser
peligrosos para el feto. La limpieza de la casa no debería ser problemática,
pero siempre será mejor hacerla con productos poco agresivos o incluso naturales.
La higiene en la alimentación
La
higiene de los alimentos con una buena conservación y preparación, evitar
los que pueden transmitir la toxoplasmosis, limpiar bien los
vegetales y no comer en lugares que no sean
de confianza ni compartir vasos y cubiertos.
Algunas
cuestiones fundamentales serían el cocinar los alimentos a más de 75 grados, no
consumir carnes ni pescados crudos, cocinar bien los
huevos, no mezclar productos crudos y
cocinados que puedan entrar en contacto y mantener la nevera y los utensilios
de cocina limpios.
La
ingesta de nutrientes debe contribuir a un estado óptimo de salud a largo
plazo. Su objetivo es promover el bienestar de dos individuos por lo que la
madre debe cuidar su dieta de forma que cubra las necesidades de energía y
nutrientes de ambos. Además, muchos de los cambios fisiológicos que se producen
durante el embarazo van encaminados también a lograr una lactancia materna
exitosa.
Ahora
bien, esto no significa que durante la gestación se deba aumentar la ingesta de
alimentos en gran medida o como popularmente suele decirse, “se coma por dos”.
Además, se produce una adaptación metabólica de la madre que permite un mejor
aprovechamiento de la dieta, y por lo general disminuye la actividad física,
por lo cual no es necesario aumentar el consumo de alimentos de forma excesiva.
El incremento de
energía debe realizarse mediante una dieta variada y equilibrada, sin abusar de
ningún tipo de alimento y sin suprimir el consumo dealguno
de ellos (en todo caso se evitarán las carnes crudas o poco cocinadas como
profilaxis dietética de la toxoplasmosis).
En
la práctica, se cubren estas metas incrementando la ingesta de lácteos (4
raciones diarias), cereales y derivados (4-6 raciones diarias), frutas (3
piezas diarias), verduras y hortalizas (3 raciones diarias) y legumbres (3
raciones a la semana).
Las
carnes, pescados y huevos, constituyen una fuente importante de proteínas,
vitaminas y minerales, aunque en se suelen tomar proteínas de origen animal en
exceso y no es necesario recomendar expresamente un aumento en la ingesta de
este tipo de alimentos. Las carnes rojas y derivadas, productos de pastelería y
dulces en general, refrescos, productos precocinados, deben ingerirse muy
esporádicamente, por su elevado contenido en grasas, sales y/o azúcares.
Se
debe cocinar con poca grasa, utilizar aceite de oliva, poca sal y emplear una
condimentación suave y aromática (orégano, albahaca, perejil), propio además
todo ello de los hábitos mediterráneos. Consumir agua abundante a lo largo del día
(1,5-2 litros). Se pueden tomar zumos naturales, sopas, o infusiones como
formas de hidratación.
Hay
que repartir la ingesta total diaria de alimentos en 4-6 tomas y evitar comer
(“picar”) entre ellas recurriendo a la fruta en caso de sentir sensación de
apetito, acompañada de 1-2 vasos de agua, para incrementar la sensación de
saciedad. Por el contrario, el ayuno puede resultar especialmente peligroso
durante la gestación. Si éste es prolongado, disminuyen los niveles de glucosa
e insulina en sangre y se incrementa la producción de cuerpos cetónicos, los cuales
podrían afectar al feto. En la gestación, estos cambios se producen más
bruscamente que en la mujer no gestante y, por tanto, se recomienda que el
ayuno nunca supere las 6 horas.
Nutrientes de especial interés en el embarazo
Vitamina D
Es muy importante que
la transferencia de vitamina D al feto se realice de forma correcta porque está
implicada en el crecimiento y la regulación del calcio. Recordemos que es una
vitamina que también depende de la exposición solar, ya que por irradiación
solar, se sintetizan en el organismo las formas activas de vitamina D, por lo
que es conveniente dar paseos al sol. Las principales fuentes alimentarias de
vitamina D son los pescados azules (sardinas, atún, bonito,caballa,
arenque, jurel, palometa); la leche y los derivados lácteos enteros, como los
quesos, yogures, etc.
Ácido fólico
El
ácido fólico (AF) o vitamina B9 interviene en procesos fundamentales como
la síntesis de ADN, entre otros. Su deficiencia puede originar anemias,
malformaciones congénitas y aumento en el riesgo de partos prematuros.
Por ello es una de las sustancias más importantes para las embarazadas.
Las
principales fuentes naturales de folato son todas las verduras de hoja verde,
como espinacas y acelgas, y otros alimentos de origen vegetal, como coliflor,
garbanzos, frutos secos y frutas frescas.
Calcio
Las
demandas de calcio son muy elevadas durante la gestación. Las recomendaciones
para el calcio se encuentran aumentadas en un 75% respecto a las de mujeres
adultas no gestantes. La demanda es especialmente importante al final de la
gestación. Esto es así, no sólo por la gestación propiamente dicha y la
inmediata lactancia, sino también para evitar posibles problemas de
osteoporosis tras la menopausia.
Estudios
recientes muestran un menor riesgo de parto pretérmino y una mejora en la
hipertensión gestacional en las madres con mayor ingesta de calcio. Las
principales fuentes de calcio son la leche y derivados lácteos, sobre todo los
quesos de pasta cocida (queso manchego), pero se deben ingerir con moderación,
ya que aunque son los más ricos en calcio, son los que mayor contenido
energético tienen (y más ácidos grasos saturados y colesterol).
Hierro
El
hierro forma parte de la hemoglobina y por tanto participa en el transporte de
oxígeno, entre otras funciones. Durante la gestación, hay varios procesos que
requieren cantidades importantes de hierro, sobre todo, en los procesos
relacionados con la “fabricación” de la sangre, aunque estas necesidades
mayores se equilibran parcialmente por un cese de las pérdidas mensuales de
hierro que se producen por la menstruación antes del embarazo. Sin embargo,
dado que la deficiencia nutricional más frecuente entre las embarazadas es la
anemia ferropénica y las recomendaciones no siempre se pueden alcanzar a través
de la dieta, se recomiendan suplementos de 30-60 mg/día.Conviene
tomar los suplementos en ayunas, incluir en la dieta alimentos ricos en
vitamina C y evitar en la medida de lo posible tomarlos junto con té o café con
leche, medidas todas ellas encaminadas a favorecer la absorción del hierro.
Además, las fuentes de hierro más aconsejables son carnes y aves tales como
pollo, pavo, ternera, conejo, cerdo magro y pescados, que contienen hierro
“hemo”, que es el que mejor se absorbe. Los alimentos de origen vegetal como
las legumbres o las espinacas tienen hierro “no hemo”, cuya absorción es
notablemente inferior. La carne roja, el hígado, la morcilla y las vísceras son
alimentos muy ricos en hierro “hemo”, pero su consumo se debe moderar debido a
su elevado contenido en grasa saturada y colesterol.
Yodo
El
yodo es imprescindible para la síntesis de las hormonas tiroideas, que
intervienen en el metabolismo celular y en el desarrollo y funcionamiento de
todos los órganos, especialmente del cerebro. El cerebro humano se desarrolla
en el seno materno y durante la primera infancia, por lo que una deficiencia en
este nutriente, sobre todo en la primera parte del embarazo, puede tener
consecuencias irreversibles sobre el desarrollo neurológico del niño.
Los
pescados y productos del mar son una buena fuente de yodo, así como la sal
yodada, que es considerada mundialmente una de las estrategias más eficaces
para la promoción de la salud.
Ácidos grasos omega-3
El
ácido docosahexaenoico (DHA) es el principal componente graso del cerebro y la
retina en humanos. La importancia de un adecuado aporte de ácidos grasos de la
familia omega-3 durante las primeras etapas de la vida se debe a su implicación
en la correcta formación del feto y a sus consecuencias a largo plazo, como en
el desarrollo cognitivo en la etapa adulta.
Además,
recientemente se han publicado estudios sobre la relación existente entre un
buen estatus en DHA durante la gestación y el menor desarrollo de alergias
durante el primer año de vida.
Pautas dietéticas en problemas gastrointestinales comunes
asociados a gestación
-Náuseas y vómitos
Las
náuseas y vómitos o emesis del embarazo son un trastorno común durante los
primeros meses de la gestación. Se detectan los primeros síntomas a los pocos
días de identificarse el retraso menstrual pero, aunque las náuseas pueden
mantenerse hasta el final de la gestación, los vómitos suelen desaparecer en la
decimosexta semana.
Desde
el punto de vista dietético y nutricional, algunas medidas útiles para aliviar la
variante más común de las náuseas y vómitos gestacionales son:
No
exponerse a alimentos de olores fuertes o cuyo olor le provoque náuseas.
Fraccionar
la dieta en 5 tomas al día (desayuno, comida, cena y dos colaciones). Se reduce
así el volumen de alimento por cada toma, se facilita la digestión y, en caso
de vómito, las pérdidas de energía y nutrientes no son tan intensas.
Los alimentos secos y
ricos en hidratos de carbono son fácilmente digeridos y suelen ser mejor
tolerados (colines, picos, pan tostado, galletas sin relleno). En cambio, los
alimentos ricos en grasa resultan problemáticos, ya que sonrelativamente
difíciles de digerir (embutidos, mantequilla, margarina, aceite, bollería con
nata o crema, guisos, rehogados).
Es
conveniente beber los líquidos sobre todo entre las comidas (agua, infusiones y
zumos). Los zumos y los batidos naturales de frutas resultan especialmente
adecuados en este tipo de situaciones.
Tomar
abundante fruta fresca y verdura.
Los
alimentos de poco volumen y elevada densidad de nutrientes, como frutos secos,
barritas de cereales, energéticas, son una opción muy recomendable para estas
pacientes.
Estreñimiento y hemorroides
Se
habla de estreñimiento en el embarazo si la frecuencia es de menos de tres
deposiciones por semana. Si a esto se asocian las hemorroides, cuya aparición
está favorecida por un aumento de la presión venosa por efecto del útero
gestante, la defecación puede ser especialmente dolorosa. Estas molestias,
además, se incrementan a medida que avanza la gestación.
A
continuación se reflejan una serie de pautas dietéticas recomendables:
- La medida higiénico-dietética más sencilla y económica para solucionar el problema del estreñimiento es hacer ejercicio moderado, sobre todo andar, ya que favorece los movimientos intestinales.
- La dieta debe ser rica en alimentos con fibra, que aumenta el residuo, retiene más agua y reblandece las heces. Se recomienda una ingesta abundante de verduras, frutas, pan integral y cereales, beber abundante agua y cantidades moderadas de té o café. De las fibras vegetales, las más tiernas suelen ejercer de forma más fácil su efecto laxante. Es el caso de las verduras de hoja y tallos, como espinacas, espárragos, acelgas, lechuga, etc.
- Las hemorroides mejoran si en la dieta se evitan los picantes, grasas, especias, alcohol así como no pasar excesivo tiempo de pie, ya que esta postura aumenta la congestión venosa.
Esofagitis por reflujo
La
pirosis o ardor por regurgitación del contenido gástrico hacia el esófago es un
trastorno habitual, especialmente en el embarazo avanzado e igualmente como
consecuencia de los cambios hormonales que se producen en esta situación
fisiológica.
Algunas
recomendaciones prácticas son:
- Realizar comidas frecuentes (al menos 5 al día) y de menor volumen.
- Suprimir chocolate, alcohol, café y grasas.
- Elevar la cabecera de la cama.
- Acostarse 2 ó 3 horas tras la última ingesta.
- Tratamiento farmacológico (antiácidos, protectores de la mucosa) si procede.
Bibliografía
BEBES Y MAS. (24 de SEPTIEMBRE de 2012). Recuperado el 2015 de ABRIL de
27, de BEBES Y MAS:
http://www.bebesymas.com/salud-de-la-madre/habitos-de-higiene-indispensables-para-la-embarazada
OTERO, C. G.
(2013). CLINICA GINECOLOGICA DEL DRES. OTERO. Recuperado el 2015 de
ABRIL de 26, de CLINICA GINECOLOGICA DEL DRES. OTERO:
http://www.clinicaginecologicaotero.com/index.php/medidas-higienico-dieteticas
MARTIN, D. U. (06 de SEPTIEMBRE de
2013). QUORUM. Recuperado el 2015 de ABRIL de 26, de QUORUM:
http://www.revistaquorum.com/?p=162
GUIMENEZ, D. (15
de ABRIL de 2002). MEDICINA 21. Recuperado el 26 de ABRIL de 2015, de
MEDICINA 21: http://www.medicina21.com/doc.php?apartat=Farmacia&id=1340
el embarazo es una de as etapas donde existen diferentes cambios en la madre y los cuidados deben amentar.para que una embarazada pueda mantenerse sana durante el embarazo es fundamental que se informe bien sobre las muchas formas de cuidar de su salud y de la salud del bebé durante el embarazo. es importante la labor de enfermeria ya que podemos proporcionar dicha informacion.
ResponderBorrarLas medidas higiénico dietéticas en el embarazo son muy importantes ya que es de gran importancia conocer de ellos para así evitar alteraciones y factores de riesgo durante el desarrollo del producto, ya que en la mayoría de las mujeres no sabemos o no estamos suficientemente informadas para conocer cómo evitar infecciones vaginales o bucales de igual manera por eso es importante para asistir a las consultas prenatales para informarnos de alimentos saludables.
ResponderBorrarMuy útil para tener una crianza natural sin demasiados problemas, es básico para que todo vaya rodado, gracias!
ResponderBorrar